
Si se dejara de lado intentar fundamentar la adicción como enfermedad en la búsqueda de sus bases biológicas, se podría avanzar más en el acercamiento entre las perspectivas revisadas. Por supuesto el problema no está en que se realice investigación en el plano biológico con el fin de entender los mecanismos involucrados en la adicción, lo cual siempre aportará nuevos conocimientos que podrán ser utilizados de diversas formas. El problema es que se intente fundamentar desde ahí el estatus de enfermedad de la adicción.
Todos los desarrollos en la línea de la búsqueda de las bases biológicas, finalmente, parecen intentar demostrar la veracidad de los cuatro principios planteados por Rush alrededor de 1784, los que a su vez son la continuación de observaciones realizadas casi dos siglos antes por clérigos (Warner, 1994). Estos principios están referidos a que: (i) la adicción es producida por la propia ingesta de alcohol, (ii) se produce una pérdida de control sobre la conducta de tomar alcohol, (iii) la adicción al alcohol es una enfermedad en sí misma, con lo que se alude a no ser dependiente de una condición psíquica, (iv) la cura pasa por la abstinencia. Estos cuatro principios son consistentes con la definición del Joint Committee revisada, e incluyen, además, la hipótesis básica que ha guiado la investigación biológica, es decir, que es la propia ingesta de alcohol o sustancias adictivas la que lleva al desarrollo de la adicción. Además, incorporan el elemento terapéutico que ha sido propio de la aproximación médica al tema históricamente, esto es, lograr la abstinencia del consumo de las sustancias adictivas. Si son estos principios, o algunos de ellos, lo que se quiere demostrar como ciertos, esto se podría realizar por diversos medios sin que sea necesario colocar todo el énfasis en la apuesta de encontrar las causas biológicas de la adicción. Al hacerse esto último, la discusión tiende a quedar desplazada de su punto central. La discusión se convierte en si existe o no una demostración para las causas biológicas de la adicción, discusión que queda sin respuesta hasta que esto se pueda demostrar claramente.